Dotaciones Industriales M&N S.A.S. es el resultado de un proyecto de grado concebido y propuesto por Nancy Buelvas Pastor, cuando cursaba el octavo semestre de Ingeniería de Mercados en la Universidad Simón Bolívar. Este sueño nació de la pasión por el sector de las confecciones industriales y del deseo de ofrecer soluciones de alta calidad en un mercado competitivo, pero también en un sector con muchas oportunidades de mejora. Mi formación académica en esta prestigiosa institución, de la cual me siento muy orgullosa, no solo me brindó los conocimientos técnicos, sino también la visión para crear una empresa que fuera sinónimo de excelencia, responsabilidad social y crecimiento sostenible.

Desde mi adolescencia, soñaba con emprender, pero siempre con la certeza de que debía basarme en una idea sólida, guiada por los principios de constancia, disciplina y fe en lo que estaba construyendo. En este camino, tuve la fortuna de contar con la confianza y el respaldo de la doctora Martha Herrera, quien, como socia y aliada estratégica, creyó en este proyecto desde el principio. Así, el 24 de septiembre de 2010, nacía oficialmente Dotaciones Industriales M&N S.A.S. en la ciudad de Barranquilla (Colombia), un nombre que refleja no solo el esfuerzo de las socias, sino el compromiso de hacer crecer la empresa con base en los valores de integridad, confianza y excelencia.

El inicio de una empresa siempre conlleva retos importantes, y Dotaciones Industriales M&N no fue la excepción. Empezamos en un pequeño local en el municipio de Soledad, pero rápidamente nos dimos cuenta de que el crecimiento era inminente. A medida que la demanda por nuestros productos aumentaba, nos vimos en la necesidad de mudarnos a un espacio más grande en el centro de Barranquilla, lo cual nos permitió mejorar la capacidad de producción y responder a las necesidades del mercado. La calidad de nuestras confecciones, combinada con un compromiso constante por la mejora, nos permitió posicionarnos como una empresa confiable y competitiva.

Con el paso de los años, tomamos la decisión de reinvertir los recursos generados en la adquisición de nuevas instalaciones, la renovación de maquinaria y, lo más importante, la capacitación permanente de nuestro equipo. En la actualidad, contamos con una atractiva cartera de clientes tanto en Barranquilla como en otras importantes ciudades del país. Este éxito es el reflejo del esfuerzo y la dedicación de cada miembro de nuestro equipo, que ha superado las expectativas iniciales del proyecto.

Es necesario resaltar que una gran parte de nuestro equipo está compuesto por mujeres cabeza de hogar, muchas de ellas con historias de superación y fortaleza. Entre ellas, quiero destacar a Shirley Jiménez, Yeimira Aguilar, Jair López, Anarge Rudas, María Alejandra Velásquez, Pabel Velázquez, entre otros, quienes con su responsabilidad y empeño han sido parte fundamental del crecimiento de la empresa. Este enfoque de inclusión y empoderamiento social ha sido uno de los pilares de nuestra filosofía empresarial. También, me gustaría expresar mi profundo agradecimiento a mi familia: Hugo Fernando Velázquez, José Velázquez, a mi socia Marta Herrera y a su esposo Carlos Tuirán, quienes me han apoyado incansablemente en este sueño.

Un hito muy significativo en nuestro recorrido fue el 22 de noviembre de 2013, cuando recibí el Premio al Mérito Empresarial, otorgado por la Universidad Simón Bolívar en la categoría de Emprendedor Bolivariano. Este reconocimiento fue un gran honor y, más allá del trofeo, me dio una mayor visibilidad ante los ojos de la comunidad empresarial de la región Caribe. Este premio también nos permitió fortalecer las relaciones con nuestros proveedores y clientes, consolidando nuestra imagen como una empresa de confianza y compromiso con la calidad.